Esta es la historia de un perro llamado Puki.
Contada desde un punto de vista muy perruno, conocemos cómo nace en el campo hasta que llega a su hogar en la ciudad.
En la casa están el Dueño, Ella y el Grandote.
Con humor, Puki nos cuenta cómo va interactuando con los humanos: tiene que aprender quiénes son, en qué consiste su idioma y, además, dónde hacer sus necesidades, entre otras instancias de adaptación.
Así aprende a leer y a escribir mientras el Dueño también lo hace, tanto que la novela sufre un giro inesperado.
Cuando Puki descubre las letras y qué es lo que hace Ella con las teclitas negras, se vuelve escritor.